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Mostrando entradas de diciembre, 2014

El tiempo no pasa sin quedar

En los días previos a la celebración de la Navidad y el Fin de Año escucho a muchas personas, normalmente mayores, contar lo rápido que pasa el tiempo. Hace nada, dicen, estaban celebrando la pasada Navidad y de repente ya está aquí de nuevo. Otra vez los turrones, los polvorones, las campanadas, las uvas. Hace nada, recuerdan, éramos niños cantando villancicos y jugando alrededor del Belén y ahora... Con sorpresa, con resignación o con ambas cosas, sus miradas y sus palabras reconocen cómo, sin apenas darnos cuenta, el tiempo pasa. Y tienen razón, desde luego. El tiempo pasa. Pero lo que no cuentan esas historias es que, además de pasar, el tiempo también queda, así que unamos a sus historias sobre el pasar del tiempo la nuestra sobre su quedar. Para poder hacerlo, hemos de preguntarnos a qué se refiere la expresión “el tiempo pasa”. ¿Qué queremos decir con ella? Decimos “el tiempo pasa” cuando sentimos una diferencia entre aquel que somos y aquel que hemos sido. Esa dife

Los faros, poema de Baudelaire

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Baudelaire VI Los Faros Rubens, río de olvido, jardín de la pereza, fresca almohada de carne, donde amar no se puede, mas la vida ahí afluye y sin tregua se agita, como el aire en el cielo, y la mar en la mar; Leonardo da Vinci, sobrío y hondo espejo, en que hechiceros ángeles, con su dulce sonrisa, cargada de misterio, se muestran en la sombra de glaciares y pinos que cierran sus países; Rembrandt, triste hospital preñado de murmullos, solamente adornado con un gran crucifijo, donde en llanto se exhala la oración de estiércol, y que un rayo de invierno bruscamente atraviesa; Miguel Ángel, lugar incierto en que los Hércules se mezclan a los Cristos, y donde en pie se alzan fantasmas poderosos que al llegar el crepúsculo desgarran su mortaja con los dedos crispados; iras de boxeador, impudores de fauno, tú que supiste ver la belleza canalla, pecho hinchado de orgullo, hombre amarillo y débil, Puget, de los forzados melancólico rey; Watteau, ese carnaval dond

Las fiestas

Las fiestas, con su repetición insistente, con su regreso constante, no dejan de recordarnos que no solo hay un calendario, sino dos , y que tampoco hay un solo tiempo, pasajero y fugaz, sino otro más que vuelve y regresa, y que nosotros andamos entremedias, con un pie el lo móvil de los días y otro en la eternidad insistente de los acontecimientos que retornan, como las fiestas. Feliz Navidad.

El ser humano en Descartes

"Pero yo ¿qué soy, ahora que supongo que hay alguien que es extremadamente poderoso y, si me atrevo a decirlo, maligno y astuto, que emplea todas sus fuerzas y toda su industria en engañarme? ¿Puedo estar seguro de tener la menor de todas esas cosas que acabo de atribuir a la naturaleza corporal? Me paro a pensar en ello con atención, recorro y repaso todas esas cosas en mi mente y no encuentro ninguna de la que pueda decir que está en mí. No es necesario que me detenga a enumerarlas. Pasemos, pues, a los atributos del alma, y veamos si hay algunos que estén en mí. Los primeros son alimentarse y caminar; pero si es cierto que no tengo cuerpo también lo es que no puedo caminar ni alimentarme. Otro es sentir, pero tampoco se puede sentir sin el cuerpo, además de que, anteriormente, he creído sentir varias veces cosas durante el sueño que, al despertarme, he reconocido no haber sentido en absoluto realmente. Otro es pensar; y encuentro aquí que el pensamiento es un atributo que me p

El ser humano en José Antonio Marina

"Lo real no nos basta. Nos sostiene, nos impulsa, nos limita, nos da alas, pero no nos basta. La inteligencia inventa sin parar posibilidades reales, que no son fantasías, sino ampliaciones que la realidad admite cuando la integramos en nuestros proyectos. El mar, gran obstáculo, puede convertirse en medio de comunicación. Y el ligero aire puede soportar nuestro peso y nosotros volar. El agua del río puede convertirse en luz y la imponente montaña en catedral. La realidad entera queda en suspenso esperando que el ser humano acabe de darle luz. ¿Entonces las cosas no son lo que son? Según y cómo. Son lo que son y lo que pueden ser. ¿Y el hombre? Lo mismo. Somos nuestras propiedades reales y el impredecible despliegue de nuestras posibilidades. Híbridos de realidad y posibilidad, somos ciudadanos compartidos de la realidad y el deseo”.                                                                   J.A. Marina, Ética para náufragos.

Nota sobre los límites, las ilusiones y la realidad

La realidad está constituída por límites que distinguen en ella los ámbitos más diversos: el éxito y el fracaso, el poder y la debilidad, la vida y la muerte, la salud y la enfermedad, la locura y la razón. Creer en ilusiones acerca la realidad consiste en afirmar la posibilidad de vivir sólo un lado del límite, manteniéndonos a salvo del otro. Desprenderse de ilusiones sobre la realidad consiste en descubrir que nada nos libra de los dos lados del límite y de su naturaleza paradójica. Y significa también descubrir que tal experiencia no es algo de lo que nos debamos librar.

Test sobre los tipos de acción

El siguiente test trata sobre algunos tipos de acción clasificados por Aristóteles como acciones voluntarias, forzosas y mixtas. Será evaluable y sólo podrás contestarlo en el tiempo de clase reservado a esta tarea. Cargando...

Un relato fantástico creado por 1ºB

María salió a pasear. Necesitaba despejarse un poco después de estudiar para el examen y comenzó a caminar sin un rumbo definido. Después de un rato se encontró en una calle desconocida. Le llamó la atención una pequeña tienda, pero aún más el cartel de la entrada. Aquel cartel decía: "Se venden cabezas".  No había nadie en la calle. La tienda estaba abierta, pero vacía. ¿Se atrevería a entrar? Con una mezcla de curiosidad y miedo, abrió la puerta y entró. De repente...