Eso es lo que me preguntaron muchos alumnos después de exponer el tema de Aquino, hace ya unos meses. ¿Será creyente o no creyente? ¿Será religioso o ateo? ¿Será de esos o de aquellos, de los buenos o de los malos, de los nuestros o de los otros? El profesor de filosofía rechaza todo planteamiento de ese tipo venga de donde venga y lo plantee quien lo plantee. Lo que quiere es poder pensar, junto con otros, sobre aquello que nos afecta y desde ahí andar y recorrer e inventar caminos. Prefiero caminar a juzgar, porque siempre hay algo nuestro en los otros, y algo de los otros en nosotros. Por eso me tomé en serio la pregunta y les invité, semanas después, a una charla sobre el asunto, que más bien se planteaba esto: "¿Dios ha muerto? Notas sobre lo Sagrado". Un grupo de alumnos asistió, y pasamos juntos una tarde estupenda, quedándonos muchos temas pendientes. Utilicé un borrador, que simplemente es eso, un paso de un camino, y que muestra dónde me encuentro hoy respecto a