¿En qué merece la pena esforzarse? Las urgencias de nuestra vida cotidiana, sus compromisos, las necesidades formativas, nuestros amores y desamores, las preocupaciones y retos laborales, los medios de comunicación y la publicidad responden con creces a esa pregunta. A pesar que no faltan respuestas, quisiéramos añadir una más que, por azar, hemos encontrado. Se encuentra en un poema de Bertold Brecht titulado Para qué sirve la bondad y dice lo siguiente: En lugar de ser solamente bondadosos, esforzaos por crear una situación que haga posible la bondad. O mejor, que la haga innecesaria. En lugar de ser libres solamente, esforzaos por crear una situación, un territorio humano, que haga a todos libres, e incluso nos libere del amor a la libertad. En lugar de ser, solo, razonables, esforzaos por crear una situación en que la sinrazón de alguien sea un mal negocio.