Diario de clase: ¿el mundo está en nuestras manos o nosotros estamos en manos del mundo?
¿El mundo está en nuestras manos o nosotros estamos en manos del mundo? He planteado esta pregunta a un grupo de alumnos y la respuesta mayoritaria ha sido que estamos en manos del mundo. Al desarrollar la respuesta me dicen que nacemos en una sociedad concreta y aprendemos a considerar bueno o malo, correcto o incorrecto, lo que ella considera como tal. Les pido ejemplos. Si nacemos en una sociedad en la que es normal usar armas, nos parecerá normal usarlas. Si nacemos en una sociedad en la que está vigente la esclavitud, nos parecerá normal la esclavitud. Si nacemos en una sociedad con desigualdad de derechos entre hombres y mujeres, nos parecerá normal su desigualdad. Una alumna añade: si no conocemos nada distinto de nuestro mundo, nos parecerá normal.
Sin embargo la respuesta no es unánime. Varios alumnos plantean que nuestro mundo nos parece normal mientras somos niños, pero al alcanzar la madurez podemos elegir y decidir. Y un alumno plantea un problema: si todo lo anterior es cierto ¿porqué cambia la sociedad?
Por mi parte subrayo la importancia del tema planteado. En él se juega el sentido o sinsentido de nuestra libertad. ¿Por qué? La respuesta en próximas clases.
Comentarios
Nuestra forma de pensar o de reaccionar ante ciertas situaciones no depende al 100% de nosotros, sino que ciertos factores externos (cultura, sociedad, etc) hacen que veas "mal" una forma de actuar por no adecuarse al comportamiento considerado como "normal".
Las sociedades cambian porque dentro de esa población inconscientemente manipulada (refiriéndome en este caso, a manipulación con estar influidos a la hora de hacer las cosas) habrá ciertas personas que, por su nivel de creatividad o imaginación, hagan o propongan algo un tanto diferente de lo que ya se ha hecho hasta ahora. Si esa idea le gusta a más personas, la apoyarán y adquirirán la misma forma de pensar. Así hasta llegar a un punto en el que todos hayan adquirido esa nueva idea como la "normal" y por tanto, se considere socialmente correcto.
Sin alargar mucho más mi respuesta, mi conclusión sobre este tema quedaría resumida en esta frase:
"La ilusión de libertad, nos proporciona la felicidad."